Desde La Escandalera caminaremos por la Calle San Francisco, aunque reprimiéndonos las ganas de entrar a conocer el edificio de la Universidad que dejaremos a mano derecha, ya que éste conformará la última etapa de nuestro paseo por el Oviedo/Uvieo antiguo.
Plaza Porlier (Fotografía: Emilio Rodríguez Álvarez)
Llegamos entonces a la Plaza Porlier, bautizada en honor del general liberal Juan Díaz Porlier (el Marquesín), que de batallar heroicamente a los franceses en la invasión napoleónica acabó colgando de la horca absolutista en 1815 por su tentativa de restaurar la Constitución de 1812 en la ciudad de A Coruña. Antes de 1920 este lugar recibía el nombre de El Campu la Fortaleza en referencia al castillo construido por Alfonso III el Magno en una de las esquinas de la muralla. En el correr de los siglos sufrió destrucciones y reconstrucciones, dando techo al arsenal de la ciudad y más tarde a la cárcel masculina desde 1818. Finalmente sería derruida en 1925 para levantar, dos años después, el Edificio de la Telefónica (hoy Movistar) de la mano clasicista del arquitecto Jesús Álvarez de Meana.
El Viaxeru (Fotografía: Denis Soria)
Muy en sintonía con la intemporalidad de la plaza se encuentra la escultura llamada «El regreso de Williams B. Arrensber», que representa a un hombre ataviado con sombrero y gabardina rodeado por su equipaje, razón por la que los carbayones lo conocen simplemente como «El Viaxeru». Es una obra en bronce realizada por Eduardo Úrculo en 1993 en el que retrata al escritor norteamericano Williams B. Arrensberg, amigo del escultor.
Palaciu de Torenu (Fotografía: Denis Soria)
Al sur de la plaza se encuentra el Palacio de Torenu. De dos alturas, con cinco ballesteras y ventanas en el bajo más seis balcones en el piso superior junto con una portada de dos columnas coronadas por escudos, entre los que está el de los primeros propietarios (la casa Maeza-Doriga). Éstos encargaron su construcción al maestro Gregorio de la Roza durante los años 1673 y 1675, quien impregnó el edificio de un estilo barroco pero apenas ornamentado. Los enlaces matrimoniales entre familias a finales del s.XVII hacen que la propiedad pase a pertenecer al Mayorazgo de los Condes de Torenu. De este modo, fue lugar de nacimiento del famoso político e historiador Xose María Queipo de Llano (1786-1843), coautor de la Constitución de 1812 y Ministro de Hacienda en 1834. Actualment es la sede del Real Instituto de Estudios Asturianos (RIDEA), entidad dependiente del gobierno asturiano fundada en 1945 encargada del estudio y la investigación de todo lo relacionado con la ciencia, la cultura y el patrimonio específicos del Principado de Asturias. Está declarado Monumento Histórico-Artístico.
Palacio de Campusagráu (Fotografía: Denis Soria)
Otra de las casonas que delimitan Porlier es la del Palacio de Campusagráu, de un aspecto más compacto. Lo levantó Xose Manuel Bernaldo de Quirós (III Marqués de Campu Sagráu) descendiente de un linaje originario de la comarca leonesa de Ḷḷuna. En él inervinieron arquitectos como Pedro Fernández Lorenzana o Domingo Suárez. Comienza a construirse en 1728 por el arquitecto Francisco de la Riva acabando la obra Pedro Antonio Mendéndez de Ambás en 1757, de ahí el estilo más puramente barroco de la primera planta (orejas molduradas, semicolumnas estriadas, ventanas aveneradas) y neoclasicista de la segunda (balcones laterales austeros, pilastras jónicas y frontones de líneas mixtas). De su cubierta destaca el alero de madera (procedente la original del robledal de Llamaquique) con tres filas de canalillos moldurados y el remate en frontón curvuo. El interior tiene un patio central de doce columnas toscanas y arcos apainelados. Además fue de los pocos edificios del siglo XVIII con agua corriente (de una paja de agua), que los propietarios consiguieron en recompensa por sus donaciones de terrenos a la ciudad. Posteriormente fue adquirido por el Concejo de Oviedo/Uvieo en 1861 para instalar la sede de la Real Audiencia y actualmente acoge las dependencias del Tribunal Superior de Justicia de Asturias. Su interior fue calcinado en la Revolución d’Ochobre de 1934 cuando los mineros prendieron fuego al edificio tras el asalto. Fue declarado Monumento Histórico-Artístico en 1943 después de la restauración de Enríquez Rodríguez Bustelo.
Edificio del BBVA, Plaza Porlier (Fotografía: Denis Soria)
Merece la pena echar un vistazo a otros edificios de la plaza, tales como el Banco de Bilbao (diseño ecléctico-modernista de Juan Miguel de la Guardia en 1903 para el entonces Banco de Asturias) y la fachada verde del Teatro Filarmónica, abierto en 1944 en los años de la autarquía con el criterio clasicista de Ramón González Villamil, sede hoy de la Sociedad Filarmónica de Oviedo/Uvieo (creada en 1907).
Teatro Filarmónica (Fotografía: Denis Soria)
Denis Soria 